Y
hace pocos días escuché unas palabras. Más que eso, eran frases de metáforas en
las que nunca pensé. Nos dijeron que la vida era como un globo, que nosotros
simplemente debíamos proteger. Algunos la inflamos de forma pequeña, pues si
nos persiguen para explotarla les costará más acabarnos. Y otros colocan todo
el aire posible en sus globos, haciendo hasta el último amago para saber que
estará llena de cosas, que ni tú te explicarás.
La
vida es como un globo, que inflamos lentamente. El aire se va de nuestras bocas
para que podamos calmarnos ante la muerte. Esperamos y esperamos,
pacientemente, sabiendo que conforme llenamos el corazón late fuertemente. Esa
pequeña luz que poseemos sabe que somos fuertes, pero algunos dejan de luchar,
porque el globo se ha desinflado hasta acabar casi que inerte. Ya las fuerzas
se terminaron, y el famoso propósito al que llaman “vida”, lo pones a un lado.
Te cansas de protegerlo, de amarlo, de quererlo… Y finalmente te rindes, porque
ya ni siquiera la dignidad hace aspavientos.
Sin
embargo, no desesperes, el globito se infla de nuevo. Te juro que esos momentos
serán llevados por el viento. Te verás a ti de nuevo, lleno de oxígeno para
seguir viviendo, y sabrás que no cometiste un error al desistir al hecho de
quedarte en el mundo en el que todos nos encontramos sufriendo…
Pero
también, de vivir para seguir sonriendo.
Hola Meliii, nunca había escuchado esta metáfora, ni planteado la vida de ésta manera, pero pensándolo de esta manera veo esta metáfora muy acertada para explicar la vida, y cómo la ve cada individuo. Muy bueno Meli, me ha encantado ^^
ResponderEliminarBueno linda, espero que estés genial. Besotes!!!
Sentí en el pasado como mi globito se desinfló hasta el fondo, deseando no existir pero hay personas que te lo llenan de nuevo, incluso te lo hacen más grande lo que fue en el pasado
ResponderEliminarun beso y muy buen texto
Que bonita entrada, me encanto!
ResponderEliminarYa me descargue tu novela, espero poder leerla pronto(: