Querido amigo…
Realmente no sé cómo empezar esta carta
(y por favor, te pido que ignores que acabo de comenzarla con ese saludo tan
cliché), porque nunca he acostumbrado escribir una, mucho menos para ti. Podría
preguntarte cómo has estado, qué tal va la vida y hasta si algún suceso
interesante ha sucedido, pero, sin embargo, seré sincera: no vengo a
preguntarte eso. Es más, ni siquiera me interesa qué estás haciendo en este
momento. El único e innegable propósito de esta carta va más allá de mi
ansiedad por saber cómo estás, supera los demonios del pasado que me
atormentaron millones de veces para saber qué estarías haciendo, ha avanzado
tanto, que yo misma me sorprendí, me sorprendo y creo, que me seguiré
sorprendiendo. Es algo que, creo, también te asombrará. Pero está bien, dejaré
de escribir cosas irrelevantes: iré al grano, como tú lo hiciste aquella noche
de Abril, en la que te abrí mi corazón como dos grandes pedacitos de mazapán
desgarrados para ser comidos por tu pequeño pajarito interior, que, sin
embargo, terminó devorándolo de manera desgarradora y brutal.
Gracias.
Gracias por absolutamente todo.
Ah, no esperabas eso, ¿verdad? ¿Qué creías?
¿Qué te diría que te odio? ¿Qué te repugno? ¿Qué en mi vida deseo volver a
verte? ¿Qué por haberme aplastado como se aplasta a una hormiga que molesta la
vista de un ser humano que se cree superior, te detesto? No, nada de eso. Más
bien te lo agradezco. Te alabo por cada palabra que pronunciaste ese día, en el
que me dijiste que no me amabas como yo te amaba a ti. Te llenaría de besos en
este momento mentira, no te besaré ni en un millón de años, por haberme
confesado la cruel verdad: que mi persona no es lo suficientemente buena para
la tuya, que mi belleza no alcanza los estratos sociales que tú mereces, que,
mi forma de pensar, es tan liberal, que hasta podría llevarte a la locura.
Gracias, por haberme abierto los ojos ante mi estupidez, mi inocencia, mi brutalidad:
¿enamorada de ti? No lo creo. Jamás podría querer a alguien tan patán, tan
lleno de perjuicios, tan idiota como para pensar que siendo rechazada, me haría
sentir degradada. ¿Sabes lo que realmente hiciste? ¿Lo que causaste? ¿Lo que
lograste? Y te hago tantas preguntas, para que te sientas en un
interrogatorio, como si yo fuese la policía mala, tratando de sacarte esa bolsa
de oscuridad que guardas en lo más recóndito de ti. Hiciste que me
valorara, que me diera cuenta de lo buena que soy. De lo poco que me mereces y
de lo mucho —oh Dios, ¡es tanto! Me compadezco—, que te has perdido. Has echado
por la borda una vida con una chica llena de colores, que imagina mundos que tú
jamás comprenderás. Has botado como a un pequeño jarrón roto, aquella
muchachilla de mirada perdida que imaginaba con fervor una historia totalmente dedicada para ti. Acabas de desperdiciar a alguien, que
simplemente te habría mantenido interesado hasta la muerte y más allá. Qué feo
debe ser saberlo, ¿no? Me refiero a que, yo no podría vivir con el remordimiento
de pensar que he aplastado la esperanza de vivir con alguien que me escriba
solo a mí. ¡Pobre, pobre de ti! Lo siento tanto, querido. Es mucho más doloroso
para ti, eso sí: yo ya pasé mi dolor. Ya soy libre de tus palabras malditas,
arraigada al pensamiento de encontrar algo mejor, estupefacta de saber que, hay
un excelente futuro para mí. Y realmente, te deseo un buen viaje en lo que te
queda de soltería, porque tu próxima esposa parece perfecta para ti: una pobre
insulsa que simplemente disfruta de fiestas y tal vez —si es que tienes
suerte—, de no llegar virgen al matrimonio. Síp, a eso le llamo vida.
En fin, debo irme. Hay una historia que
me espera cómodamente en mi escritorio. Creo que es la mía, esa linda y gran
novela, que a lo mejor no tendrá príncipes,
ni tampoco princesas; donde es poco probable que encontremos unicornios entre
los árboles y mucho más imposible que sea perfecta como para no tener
problemas, pero, ¿te digo algo?
Lo único que me importa, es que tenga
final feliz —sí, con muerte y todo, porque es inevitable—, ese, que tú nunca
podrías haberme dado.
Me despido, querido amigo, con un gran
beso por mi parte. Espero que tengas —desde el fondo de mi corazón—, una buena
vida, insulsa, pero buena.
Atentamente…
La
escritora a la que dejaste ir.
Un corazón roto es una bendición de Dios. Es solo una forma de hacernos saber que nos ha salvado del incorrecto ;) |
Sinceramente PERFECTO. Parece que me lees la mente xD hay alguien del pasado que está volviendo a atormentarme y con esto, me he dado cuenta de que debe seguir en ese rinconcito oscuro (en el cual lo coloqué hace un tiempo)
ResponderEliminar¿Te parece si lo comparto en mi blog?
La verdad es que quien no te haya valorado que le den por el culo pero bien. Pero así, de buen rollo eh!!
ResponderEliminarNo me gusta que escribas texto tan tristes aunque son preciosos!!
Escribes genial!
Un besote!!^^
Woo :( estuvo tan. Sdnsdfjnskdsjnfsdfkdsjnfsdkfjsdn :'( enserio que de verdad me cayó, sentí todo lo que quisiste transmitir. Y sabes porque las personas son así? Porqué quieren a las personas fáciles. Quieren lo normal. Lo simple. Y cuando ven algo raro, no quieren nada. Dime quien encontrara a una persona como tu que es una excelentísima escritora? Tu eres única y sabes que fue la lección que te dio todo esto (: que te valorarás a ti misma! Tu eres alguien que de verdad vale la pena y la siguiente persona que venga a tu vida de seguro será la indicada! :D sigue viviendo y sigue experimentando y recuerda todos los recuerdos que te dio él :D
ResponderEliminarSé feliz, sigue escribiendo tan hermoso como lo haces!
Un saludo!
Melll!!!! ¿Siempre tienes que ser tan adorable? Vi esta mañana tu comentario en mi blog por el correo del móvil y me sacaste una sonrisilla >_< Yo creo que debes ser la chica más adorable del planeta... ¡¡ADOREMOS A MEL!! x)
ResponderEliminarPor cierto, acabo de ver que publicaste un libro!! *-* No sabes cuánto me alegro, de verdad, muchas felicidades :) No puedo prometerte que vaya a leerlo, aunque lo intentaré, pero siempre me ha costado mucho trabajo leer en el ordenador, lo siento ;___; Aún así lo tengo descargado, y si puedo prometerte que intentaré intentarlo :3 Al menos soy sincera >_<
UN BESO ENORMEEEEEEEEEE PARA TIIII! Y SOLO PARA TIIIII! No vayas a compartirlo ehh? Que es solo tuyo >3<
PD: El balde de agua fria de antes me refrescó, graciaaaas! :D